Saber o Conocer

Saber o Conocer… Tú eliges, o tal vez no y sólo quieres creerlo

Saber o Conocer, un tema ya tratado, pero que ahora viene dado, porque he recibido un correo haciéndome una serie de preguntas, pero se parece a otros muchos que recibo.

Y la verdad es que, cuando leo ciertas preguntas, especialmente las más complejas, no sé cómo responderlas, especialmente en la forma que se plantean.

Nunca he puesto, en ningún sitio, que yo sea un maestro espiritual, que tenga respuestas para cosas tan elevadas, ¿o no sería mejor decir espesas? Con lo cual me siento un poco sobrecogido de responsabilidad.

Marcando la diferencia

Pero, debo decir, que no se trata de cosas espirituales en realidad, por más que a alguno pueda parecerle.  Pero, en este caso, y esto quiero que quede muy claro, va por esta línea, sólo va de los que creemos saber y de lo que realmente podemos conocer con certeza.

Sin embargo, otras veces va sobre arcontes, reptilianos, campos de fuerza energéticos, matrix de diverso orden, y todas son lo mismo, todas son igualmente oscuras y todas se parecen en no pocas cosas, una de las cuales es eso, que resultan espesas.

Hasta donde podemos conocer sobre lo espeso y trascender el general saber

Y no digo espesas porque no las comprenda. A veces, sólo es cosa de cierta paciencia y entrenamiento en análisis. Pero las llamo espesas, porque creo que están hechas así adrede, para que la gente contemple como seres especiales a quienes las propagan, como muy eruditos, gente de saber. Al tiempo que ellos no las comprenden, porque no están hechas para ser comprendidas, para que ellos las puedas conocer.

Lo cual, en si mismo tiene sentido, porque si te paras, en realidad la mayoría no tienen lógica demostrable. Su fin es, primero vender esa mercancía y, también, desalentar investigarlas por espesas, con lo cual se logra que se acepten, tal cual, por su falta de capacidad de comprensión.

Y en ciertas áreas, y lo sé bien, gracias a esto concluyen que es por su falta de evolución. Quiero decir: La necesidad, inevitable, de volver a encarnar para lograrlo (y esto me parece no solamente triste, sino incluso perverso por parte de quienes difunden esas ideas)…

Pero como me ha parecido un tema interesante, copio y pego las preguntas que, repito, no son de esta única persona (no son una respuesta dirigida a ti exclusivamente que las formulaste), sino que pueden considerarse similares en su fondo, las cuales me llegan con regularidad.

Por tanto, se pueden aplicar a muchas cuestiones y dudas que os surgen, así que espero lo apliquéis a vuestras propias preguntas, que os sea útil, que podáis por vosotros mismo ver la diferencia entre saber o conocer:

PREGUNTAS

1. ¿Para qué crees que sirve todo este follón de haber estado en la unidad, dios o el todo, en plenitud absoluta y con sabiduría infinita y tener que separarnos en innumerables formas y dimensiones pasándonoslo jodidamente mal para que el premio final sea volver otra vez al principio unitario de donde partimos?.

A) ¿Es que dios o el todo es un tonto y necesita aprender mediante la praxis en los distintos planos dimensionales?

B) ¿Es que hay espacios espíritu-mentales desiertos y tienen que ser ocupados por una mente o mentes unitarias en expansión?

C) ¿No estaríamos todos muchos más tranquilos y a gusto en nuestra casa celestial de donde partimos y con otras pedagogías menos traumáticas, si es que tenemos que aprender o experimentar algo?

RESPUESTA GENERAL PARA ESTA CUESTIÓN, Y OTRAS SIMILARES

Una pregunta… ¿te das cuenta que las afirmaciones, recalco afirmaciones, en que basas las preguntas que estás haciendo, son sólo un dogma de fe?

Respeto las creencias de cualquiera (siempre que no me las quieran imponer, como los neo-fascismos actuales o pasados), pero eso no significa que, como dicen los ingleses, “las compre”. ¿Por qué las compras tú?

Y más cuando te generan tanta confusión. Si todavía te ayudaran lo comprendería, pero únicamente ayudan a quienes las venden, que con ello hacen cursos, ponen libros en el mercado y llenan bolsillos, ¿pero a ti te ayudan? ¿Hacen tu vida más feliz o mejor de alguna forma, te dan alguna opción para ello si acaso…?

Pero para ayudar a profundizar con mi propio punto de vista, y a modo de metáfora, recordar a Siddhartha de Hermann Hesse. En ese libro el protagonista es un Brahmán, lleno de libros, teorías y erudición, de saber, pero un día decide partir con los samanas del bosque porque quiere “realmente” conocer, y sólo eso se hace experimentando.

Fe basadas sólo en conocimientos teóricos

El problema es que los conocimientos teóricos sin demostración posible sólo crean confusión, pero son agradables porque nos sirven como trincheras frente a la verdad (Ortega y Gasset- «La Rebelión de las Masas»). Mientras que los conocimientos que nacen de la experiencia son los que realmente hacen avanzar.

Pero la gente no quiere avanzar, porque lo primero que tienen que hacer es pensar por si misma, y eso es muy duro. Porque pensar, como siempre he dicho, es ser capaz de imaginar que lo que creemos es diferente a lo que parece y nos han hecho creer, y eso es muy duro. Aparte de que un paso más allá, donde está la clave, está el hacer algo, y esto es un compromiso desafiante, que necesita real esfuerzo y mucho valor, valor del que carece la mayoría. Conocer no es un camino sencillo.

En vez de ello eligen sentarse a contemplar y repetir cosas que, dichas de cierta forma suenan bien, como lo hacen las soflamas de los políticos, pero que como estas no se sustentan en nada y, menos aún, te ayudan en nada para mejorar tu vida.

¿Pero qué pasa cuando alguien decide dar el paso adelante, hacer algo diferente y salir de la manada…?

El Conocimiento Real es Experiencia

En mi caso y mi terreno (y me atrevo a hablar de ello porque, por este conocimiento, supongo, diferentes personas me preguntan por diferentes temas), he visto muchas, muchas veces, romper a llorar de forma incontrolable a personas en situaciones de expansión de la Consciencia, eso es Conocimiento real… ¿Por qué crees que lloraban, por alguna emoción consoladora y confortante…? Sólo pensar esa opción provoca una sonrisa… No, sino por enfrentarse a una Verdad que no se esperaban para nada en su «constructo» mental, participado de tantos programas y condicionamientos inconscientes, y verlo derrumbarse.

Y de ellas, de estas personas, la mayoría me decían que querían trabajar conmigo para saber y evolucionar, ¿pero queréis saber la verdad?  La verdad es que, aparte de que muchas nada más asomarse ya se bloquearon, no completaron la experiencia, para aquellas que sí se atrevieron a hacerlo es que la mayoría no volvieron, no tuvieron el valor, por no decir algo más contundente, de después de esa primera experiencia querer saber más.

Y lo entiendo, no lo critico ni lo recrimino, os lo aseguro, sólo lo observo y comprendo, demasiado lo comprendo porque sé que la Verdad es dura (hablo más de este bloqueo y su origen en este artículo).

La Verdad no es Amable

Es amarga y triste (se parece mucho a lo que Castaneda describía cuando te quitas la mente del Predador, pero olvídate de comprenderlo a nivel intelectual, y así pretender saber a qué se refiere, para ello hay que vivirlo.

Cuando oigo a ciertas personas hablar de apego, de ego, de separación y otras cosas similares, muy lindas todas ellas, sólo analizando la forma en que hablan o escriben, por el tono y la forma que lo hacen, sé que sólo repiten como loros cosas viejas y usadas, pero no tienen la menor idea de lo que hablan y hasta exaltan.

Se nota demasiado que no lo han experimentado a nivel del Ser, de la Consciencia. Nada de todo ello es experiencia real, y sin la experiencia, ¿qué valor tienen sus palabras?

Si, realmente, lo hubiesen hecho, sus palabras ya no sonarían huecas. Sabrían y para ellas se habría derrumbado, sin más, cosas como el ego (EGO), el apego, la separación, la duda y tantas otras cosas que conforman nuestra ignorancia y la suya. E, inevitablemente, se les notaría en el tono y la forma en que entonces hablarían.

Como dicen, una cosa es Predicar, otra Dar Trigo, en este caso, Saber o Conocer.

Es fácil decir que se pretende SABER y llenarse de conceptos e ideas complejas, nos da la sensación de seguridad aunque sean creencias sin base o fundamento. Y aunque lo tuvieran, ¿qué sentido y hasta valor tienen si sólo viven en tu intelecto, no de realmente CONOCER?

Lo difícil es vivir el camino de lograrlo, que significa EXPERIMENTAR por uno mismo, y no tomar el primer producto que suene bien porque si. Eso sólo nos conduce a laberintos, de donde nunca saldremos, y perderemos algunas de las cosas más valioso que tenemos: Tiempo, Vida, Energía…

Y esto lo puedo afirmar porque llevo muchos años, ya demasiados, observándolos, y sé que prácticamente nada que no hayas experimentado por ti mismo sirve, nada.

Esto no es nuevo, hay quién ya lo dijo

Y si quieres, recuerda las palabras de Buda, él lo dijo mucho mejor que yo:

«No creáis en nada simplemente porque lo diga la tradición, ni siquiera aunque muchas generaciones de personas, nacidas en muchos lugares, hayan creído en ello durante muchos siglos.

No creáis en nada por el simple hecho de que muchos lo crean, o finjan que lo crean. No creáis en nada porque así lo hayan creído los sabios de otras épocas. No creáis en lo que vuestra propia imaginación os propone, cayendo en la trampa de pensar que Dios os lo inspira.

No creáis en lo que dicen las sagradas escrituras, sólo porque ellas lo digan. No creáis a los sacerdotes ni a ningún otro ser humano.

Creed únicamente en lo que vosotros mismos hayáis experimentado, verificado, y aceptado después de someterlo al dictamen del discernimiento,  y a la voz de la conciencia.»

Ahora, y después de todo esto: ¿De todo lo que me hablas, qué has experimentado por ti mismo y qué es simple tradición?

Piensa por ti mismo

Y también repito lo del principio: ¿Te das cuenta que todas las afirmaciones, recalco afirmaciones, que estas haciendo son sólo un dogma de fe? Nada hay que confirme, que son más ciertas que el Pecado Original, Adán y Eva o cualquier otra cosa similar.

Espero que toméis esto como una reflexión a hacer con vosotros mismos: Preguntaros vosotros sobre qué es saber y qué es conocer. No lo aceptéis porque yo lo diga, porque entonces estaréis en el mismo laberinto.

Gracias por haber llegado hasta aquí, saludos a todos.

PD.: Nada de esto es un crítica a nada ni a nadie, sólo una reflexión, para ayudar a comprenderlo os invito a ver, por ejemplo, mi último vídeo incluido en este artículo:

Antes de Emprender el Vuelo (II)